Depilación segura en Almería. Depilación eficaz
Hoy en día nos encontramos con métodos de depilación diversos. Unos ofrecen resultados temporales y otros definitivos; poniendo un punto de atención en “definitivos”, ya que con el proceso de envejecimiento se activan folículos de determinadas zonas lo que hace que surja pelo donde antes no había (como por ejemplo las orejas) o donde previamente ya se había realizado un método de depilación definitivo (citamos como ejemplo la espalda).
Dentro del grupo de depilación permanente, hay varias técnicas (Alejandrita, diodo, IPL) y dentro de cada técnica hay distintas plataformas de diversas marcas, unas mas conocidas, otras con mejor propaganda, otras muy eficaces pero aún desconocidas… si bien, cualquier método de depilación, cualquier técnica de depilación, cualquier máquina de depilación, no es efectiva si las manos que la manejan no son las apropiadas. Esto es, si no han sido formadas en el manejo de la técnica, en el cuándo, dónde y cómo utilizarla. Aquí cobra importancia tanto la formación en la maquinaria a utilizar como, y muy importante, en la valoración de a quien se le vaya a aplicar.
La valoración previa del paciente es fundamental antes de cualquier método de depilación. La persona a la que vamos a aplicar el tratamiento no es siempre la misma e incluso siendo la misma, las circunstancias varían, por lo que la historia clínica es esencial. Aquí cobra importancia la valoración médica previa a cualquier procedimiento, en este caso, en la depilación con láser de diodo.
No es lo mismo un fototipo I que un IV y en la misma persona, según zonas, el fototipo varia lo que hace que los parámetros de la maquina se deban ajustar. Igualmente, no todas las zonas del cuerpo tienen la misma constitución: partes óseas, partes grasas,…, e incluso variaciones por patologías: atrofias, cicatrización anómala, queloides…, características que se deben valorar a la hora de hacer una depilación segura y eficaz.
Hay que preguntar sobre depilaciones previas o tratamientos de estética en general así como en los resultados y posibles alergias o reacciones posteriores. Además es muy importante incidir en antecedentes médicos ( lupus, epilepsia...) , enfermedades previas o activas ( liquen, herpes...), medicaciones fotosensibilizantes, anticoagulantes, tratamientos hormonales, embarazo,…. A la vez que se valoran estos aspectos, también hay que valorar otros factores como hábitos tóxicos o exposición solar, ya que son predictores de malos resultados o reacciones a corto-medio plazo
Ya en la sesión, centrados en el tipo de piel, tipo de pelo, densidad y localización, se van ajustando los parámetros para evitar posibles efectos no deseados: quemaduras, posteriores pigmentaciones… Si bien es verdad que a veces tras una sesión de depilación puede aparecer cambios de pigmentación, si todo se ha hecho de manera correcta antes, durante y después de la sesión, desaparecerán en unas semanas.
Por último hay que tener en cuenta los cuidados posteriores tras la depilación y entre depilaciones. Uno de los consejos más repetidos por todos los profesionales de la medicina estética y de la estética en general es la protección solar. El sol provoca daños en nuestra piel más si ha estado expuesta a tratamientos como el láser. Si durante o tras una sesión aparece algún efecto secundario no deseado, el profesional sanitario que le haya realizado la sesión, sabrá informarle y ayudarle. De ahí la importancia de que cuando se decida a hacer un tratamiento estético en general o una depilación en concreto, acuda a centros especializados que dispongan de un control médico tanto para valoración inicial, durante el tratamiento y posterior a éste.